Cultivar la amabilidad y el servicio

A menudo nos horroriza el enfoque y el trato insensibles que reciben los seres humanos en todo el mundo y que podemos ver a diario en diversos dispositivos tecnológicos. Vemos cómo los niños se acuestan con hambre y, en algunos lugares, incluso mueren de hambre.

Vemos la destrucción de la guerra que afecta a familiares, hogares, empresas y escuelas de los niños. Nos preocupamos cuando vemos los signos visibles de familias desesperadas que buscan asilo para una vida mejor, dejando todo y a todos los que conocen y quieren para encontrar seguridad. Nos preguntamos por qué ocurre esto y a menudo nos sentimos impotentes para hacer algo para cambiar la situación.

Sin embargo, podemos cambiar las situaciones, una persona y un encuentro cada vez. De hecho, si no actuamos donde estamos y de cualquier manera que podamos esta ola de destrucción no terminará. Pero, ¿cómo hacerlo? Le sugerimos que sea amable, que sirva a los demás y que enseñe esos dos actos a los niños de su vida.

¿Cómo compartimos la bondad y el servicio en nuestra parte del mundo?

En primer lugar, debemos decidir hacerlo activamente. Después, debemos ser conscientes de las necesidades que nos rodean y pasar a la acción.

  • Empieza por tu casa y tu familia¿Necesitan los miembros de tu familia ayuda con las tareas, un oído atento o un corazón solidario? ¿Puedes llamar o escribir a alguien hoy? ¿Puedes ofrecer tu tiempo? ¿Puedes servir a alguien? ¿Puedes tender la mano para reparar y calmar los sentimientos heridos? ¿Puedes ofrecer una sonrisa?
  • Echa un vistazo a tu comunidad¿Hay proyectos de servicio en los que puedas participar? ¿Puedes proporcionar tarjetas de regalo con alimentos a personas o familias a través de una organización o iglesia? ¿Puede ser voluntario en una organización sin ánimo de lucro? ¿Puedes utilizar tus habilidades y talentos para ayudar a los demás?
  • Infórmate sobre las necesidades y actividades de todo el estado. ¿Puedes identificar una necesidad que necesite un mayor «arreglo» a través de la defensa? ¿Puedes educar a otros sobre un tema que no se entiende bien? ¿Puedes alzar la voz cuando se promueven ideas y actos destructivos? ¿Puedes ofrecer una alternativa más amable u orientada al servicio?
  • Comparte recursos con organizaciones y lugares de todo el mundo. Recuerda que todos tenemos tres fuentes de ingresos: tiempo, talentos y tesoros. Aunque no podamos ir a otro país, podemos encontrar la manera de prestar servicios a quienes sí lo hacen. Únete a otras personas de tu comunidad para apoyar los esfuerzos mundiales en favor de las personas, los animales y el propio planeta.

Haz tu granito de arena donde estás; son esos granitos de arena juntos los que abruman al mundo.

Desmond Tutu